Estrategias Digitales


Una estrategia digital se puede definir cómo todas aquellas acciones que ejecuta una empresa u organización para aumentar presencia y relevancia en medios digitales como redes sociales, sitios web o incluso dentro de los motores de búsqueda como Google.

La intención es atraer, convencer y fidelizar clientes potenciales y consumidores de una marca y lograr elevar las ventas de la compañía y aumentar su notoriedad en el segmento. En este post te explicaremos a detalle qué es, cuáles son sus elementos principales, su importancia y qué necesitas para crear tu propia estrategia digital.

Erróneamente se encasillan a las estrategias digitales únicamente como las iniciativas de marketing que una empresa puede generar para llegar a sus clientes potenciales en línea.

Sin embargo, una estrategia digital desde su concepto agrupa todas aquellas acciones a través de canales y formatos de comunicación inbound (de atracción) y outbound (de impacto) que tienen el propósito de atraer personas hacia la marca y contactarlas para fines comerciales, respectivamente.

Así que, en síntesis, una estrategia digital —también denominada estrategia de medios digitales— es una planificación enfocada en maximizar los beneficios comerciales de las bases de datos y las iniciativas basadas en tecnología específicas de una empresa.

Una estrategia digital de éxito requiere equipos multidisciplinarios —desde líderes ejecutivos, pasando por marketing y TI— que sean capaces de romper el silo departamental y proporcionar una experiencia al cliente sólida, consistente y diferenciada.

Elementos de una estrategia digital

Aunque mencionamos que una estrategia digital es un proceso artesanal, adaptado a las necesidades de cada organización, hay algunas áreas de acción y procesos que pueden ser encontrados en la mayoría de los casos, por ejemplo:

  • Branding: se trata de una forma de gestionar las estrategias de marca de una organización y que incluye la planificación y administración de los elementos de una marca para mejorar la percepción que tienen los consumidores de ella.
  • Buyer persona: la persona de una empresa es la representación semi ficticia de su cliente ideal. Gracias a esto, las acciones de una estrategia digital estarán diseñadas y dirigidas específicamente hacia el tipo de usuario que necesita impactarse.
  • Customer journey: el viaje del cliente permite usar la información de las motivaciones e intereses para definir su comportamiento y crear una ruta que va desde el primer contacto hasta la conversión.
  • Plataformas: toda estrategia digital debe estar apoyada en plataformas y herramientas digitales que maximicen las posibilidades de impactar e interactuar con los usuarios (por ejemplo, sitio web, blog, landing pages, aplicaciones móviles, redes sociales, entre otros).
  • Indicadores: una estrategia digital debe poder proporcionar resultados medibles que ayuden a evaluar el rendimiento de las acciones. En ese sentido, unos de los elementos fundamentales que posee son KPIs (Key Performance Indicators) que permitan determinar el avance de las planificaciones.
  • Formación: realizada con la intención de preparar y formar a los recursos humanos en el uso a corto, mediano y largo plazo de las estrategias y herramientas enfocadas en todas las iniciativas.

Crear e implementar una estrategia es un factor clave del proceso de transformación digital de una organización y garantiza que la tecnología se está integrando de acuerdo a los objetivos generales y específicos del negocio.

Para comercializar productos y servicios es fundamental comprender dónde están los clientes potenciales, que actualmente se encuentran en línea. Por ello, contar con una estrategia digital sólida y adaptada a las necesidades de la compañía permite:

  • Aprovechar los recursos disponibles.
  • Conocer el mercado y a los clientes.
  • Medir los resultados.
  • Obtener flexibilidad y dinamismo en los procesos.
  • Segmentar cada acción de acuerdo al público objetivo.
  • Construir la marca.